¿Qué pasa si me multan fuera de España?

Durante las vacaciones, son muchas las personas que utilizan el coche como medio de transporte, ya sea para viajar por territorio nacional o para moverse en el extranjero. Alquilar un vehículo para conocer los puntos más emblemáticos de una región es una excelente opción para aprovechar los contados días de descanso que podemos dedicarle al viaje. Pero aunque nos facilite mucho las cosas, también puede ser que las autoridades del país nos pongan multas. Podemos cometer infracciones por muchos motivos: desconocimiento de algunas señales, mala indicación del GPS, prisas, nervios por estar conduciendo en un lugar desconocido… Si te pasa, lo primero es intentar que el suceso no te amargue las vacaciones, ¡le puede pasar a cualquiera! Pero, ¿y después qué? ¿Qué pasa con la multa una vez volvamos a nuestro país y a nuestra rutina?

Multas

UNA BASE DE DATOS DE MULTAS PARA TODA LA UE

Todos los países que forman parte de la Unión Europea comparten los datos de sus conductores, así que, al igual que España envía las multas de las infracciones que cometen aquí los turistas extranjeros, también a nosotros nos acabarán llegando. Cosa distinta es que cometamos la infracción en un país que no forme parte de CE, en cuyo caso conviene conocer antes la normativa, por si acaso queremos volver a ese país y resulta que estamos ‘fichados’. En la UE, la mayoría de los países encargan el cobro de estas multas a empresas privadas que se dedican a recaudar impagos.

Los países miembros tienen acceso al Registro de Vehículos del Organismo Autónomo Jefatura Central de Tráfico (D.G.T.) donde pueden consultar todos los datos necesarios para tener identificados a los conductores de los vehículos matriculados en España, con los que se han cometido infracciones en otros territorios. Es decir, el conductor estará identificado tanto si conduce su propio coche como si comete la infracción con un vehículo de alquiler. Con esta medida se busca hacer más conscientes a los conductores de que deben cumplir las normas de circulación allá a donde vayan, y que no se sientan impunes en las carreteras de la UE, ya que las infracciones que cometan lejos de casa, también van a ser notificadas.

¿ME PUEDEN EMBARGAR?

Y aunque todos los conductores se encuentren en una base de datos común, lo que no puede hacer ningún país miembro de la UE, es embargar una cuenta extranjera. Por otra parte, tienen hasta un plazo de un año para notificar las multas, o bien interrumpir el proceso si así se considera. Es decir, que si cometemos una infracción en Portugal, siendo ciudadanos españoles, sin cuentas ni bienes en Portugal, no habrá forma legal para que el organismo portugués pueda recaudar el importe de la sanción que se ha quedado pendiente de pago. Otra cosa es que si tengamos una cuenta en dicho país.

Multas

Otro aspecto importante que hay que saber es que las empresas privadas de recaudación sellan acuerdos con organismos como por ejemplo los Ayuntamientos, para poder obtener un porcentaje de la multa. Esto supone un interesante negocio, que permite a estas empresas llevarse una buena cantidad de cada multa que consiguen recaudar. Se basan en que al no haber posibilidad de embargar cuentas, dichas multas son mucho más difíciles de cobrar, y también de notificar, al tratarse de un conductor de otro país, con costes de notificación más elevados. Así pues, los organismos de tráfico de muchos países optan por delegar esta tarea a empresas privadas. ¿Qué significa esto? Que harán grandes esfuerzos para conseguir que el infractor abone la sanción.

Es bastante frecuente que persigan a los conductores con cartas de pago, muchas firmadas por abogados, y con importes más elevados que el real de las multas. Generalmente, ofrecen negociar el pago a cierta cantidad inferior, para zanjar la deuda. En realidad, no hay leyes vigentes que puedan obligar a un ciudadano a pagar una multa de tráfico, ya que no pueden aplicar costas procesales y generar acciones legales. Pero sí pueden resultar muy molesto recibir misivas amenazadoras de forma continuada. De ahí la importancia de conocer la normativa vigente en relación con este asunto. Aunque sin duda lo mejor es conducir con precaución y tratar de no cometer infracciones.