Con la llegada del buen tiempo llega el momento de estar al aire libre, de hacer senderismo, ir a la piscina, salir a correr, con la bici, pero sobre todo es inevitable tomar el sol cuando vamos a la piscina y de vacaciones en la playa. No digamos si tenemos una terraza o jardín en casa, porque ya la exposición es diaria y durante más tiempo de lo que deberíamos.
Por eso no sólo hay que prevenir con protectores solares idóneos según tu tipo de piel y riesgo, si no saber el tiempo máximo de exposición y así evitar problemas cutáneos que pueden derivar en melanomas o algo peor, incluso cáncer de piel. Toma buena nota porque aún queda verano para rato, calor, y horas de sol.
1NOS PONEMOS ROJOS ENSEGUIDA
El enrojecimiento de la piel causado por quemaduras solares aparece en una persona con fototipo de piel III (es decir, morena clara y con pocas pecas, que en ocasiones se quema y a veces se broncea en un tono medio) y que es el más común entre la población española, a la media hora de exposición al sol en el mes de julio o agosto.
Eso nos indica que la exposición al sol, como veremos ahora, debe de ser más breve de lo que imaginamos. Es muy diferente si lo hiciéramos en enero, por ejemplo, ya que a piel tardaría 150 minutos en sufrir ese enrojecimiento, según un estudio realizado en horas de gran exposición (a mediodía, entre las 12.30 y las 13.30 horas). Por supuesto hay que seguir siempre la recomendación de evitar tomar el sol en horas centrales. Mejor a primera hora de la mañana o última hora de la tarde.