Hemos tenido unos días de tregua, pero ya parece que en tres días volveremos a noches y días tórridos. Y es que si sumamos todo habremos pasado un verano extremo, casi una ola de calor continua durante dos meses, con algún día de tregua. 30 grados ya nos parece primaveral, pero siempre hay formas de refrescarte, también en la alimentación. Son recetas veraniegas frescas, nutritivas, saciantes como esta que igual no conoces de sopa fría de melón con jamón serrano crujiente. Toma buena nota de qué lleva y cómo hacerlo.
7CONSIDERACIONES A TENER EN CUENTA
Para llevarte con seguridad un melón perfecto, hay que ver si está en su punto. Hay una técnica sencilla: lo primero es que al cogerlo se note pesado y segundo, presiona ligeramente los extremos y estos deben de ceder ligeramente. Significará que está en su punto.
También recordarte que las cantidades son optativas, y que las que te hemos indicado, para que te hagas una idea, da para unos 20 vasitos tamaño chupito. Y ni que decir tiene que en cuanto al jamón serrano, cuanto mayor calidad mejor. Si te puedes permitir un pata negra, ya será de escándalo.
