La Corporación municipal ha guardado este miércoles un minuto de silencio en señal de «repulsa» por el último crimen machista confirmado en Sevilla por la Delegación del Gobierno contra la Violencia de Género. Se trata de la mujer hallada muerta en un transformador en la zona de Palmas Altas. No constaban denuncias por malos tratos. La víctima mortal –la octava en Andalucía en lo que va de año 2022 y la tercera en la provincia de Sevilla– tenía 44 años y una hija menor de edad.
La delegada de Igualdad y Recursos Humanos del Ayuntamiento hispalense, Clara Macías (PSOE), ha hecho un llamamiento a la sociedad para que, ante «cualquier indicio» de violencia de género, lo denuncie. Ha resaltado la labor que realiza en la capital la red de Centros de Información y Atención a la Mujer (CIAM) para prevenir casos de violencia machista y ha apelado a la necesidad del «compromiso de toda la sociedad» para «erradicar esta lacra».
El número de víctimas mortales por violencia de género se eleva a 28 en España en lo que va de 2022 y a 1.158 desde que se contabilizan estos datos, en 2003. En Andalucía son ya ocho en 2022, superándose el total de las víctimas mortales registradas el año pasado. Los últimos casos en Andalucía fueron los de una mujer de 50 años cuyo cuerpo sin vida fue localizado en su vivienda de Albuñol (Granada) tras ser disparada por su marido, que posteriormente se quitó la vida, y el de la mujer de Dos Hermanas que murió desangrada a finales de junio tras recibir un centenar de puñaladas de su pareja, que también se suicidó.
A estas mujeres se suma otra hallada asesinada en junio en la orilla del Guadalquivir y una mujer de 50 años, vecina de Tíjola (Almería), el 27 de mayo. A esta le siguió dos días después otra de edad similar en Benajarafe (Málaga). Además, el 22 de mayo una mujer de unos 26 años murió en el Hospital Reina Sofía de Córdoba tras ser apuñalada con un arma blanca en la madrugada del día anterior en el municipio de Montemayor (Córdoba), después de que una mujer de unos 50 años se hallase localizada muerta junto al cadáver de su marido en un inmueble de Fuentes de Cesna, una pedanía de Algarinejo (Granada).