Las berenjenas son saludables, nutritivas, versátiles y deliciosas; y cuando se presentan empanadas, se convierten en la hortaliza favorita de grandes y pequeños. Con algunos trucos muy sencillos, puedes hacerlas bien crujientes y sabrosas; tanto, que esta se convertirá en tu forma favorita de disfrutarlas.
Si en tu familia hay alguno que no se alegra mucho al comer verduras, ya verás como le cambia la cara al ver y saborear este plato.
3La importancia del remojo para un resultado crujiente y divino
Una vez que las tengas rebanadas, ponlas en un bol y vierte la cerveza sobre ellas. La cerveza cumplirá dos funciones: por una parte, va a contribuir para eliminar el sabor amargo que es tan característico de las berenjenas, y, por otro lado, ayudará a que no chupen tanto aceite al momento de freírlas.
Déjalas sumergidas por al menos 30 minutos para que eliminen todo su gusto amargo y al finalizar, escúrrelas muy bien. De ser posible pásalas por papel absorbente y presiónalas un poco para eliminar el exceso de humedad.