Los baños de barro llevan disfrutándose desde la antigüedad, debido a sus múltiples beneficios. Es lo que se conoce como fangoterapia. El fango, aplicado sobre la piel, es una fuente de belleza, pero también tiene efectos curativos y se puede utilizar para tratar distintos tipos de problemas cutáneos. Los barros tienen un gran poder de absorción, pueden neutralizar la acidez, proporcionar una mineralización profunda y estimular la cicatrización.
1LOS BENEFICIOS DE LA FANGOTERAPIA
También destaca su poder de conductividad calórica, lo que le brinda propiedades antiinflamatorias. Es, por lo tanto, un tratamiento ideal para aliviar artritis, reumatismo, gota, o rehabilitaciones después de fracturas de huesos. Incluso puede tratar afecciones de garganta. Sin embargo, no sirve cualquier barro. Tiene que utilizarse un tipo de lodo muy específico con determinados sedimentos minerales y orgánicos. En España contamos con varias playas con arenas con estas características donde podemos acudir libremente a embadurnarnos de barro terapéutico.