Cada vez más personas acuden a los bancos en busca de las bondades de las cuentas remuneradas para hacer que su dinero se multiplique solo.
En un panorama socioeconómico tan complicado como el actual. Los consumidores buscan toda posible herramienta que les permita ahorrar o ganar en calidad de vida, y uno de los primeros lugares a los que examinan con lupa es a los bancos.
Las entidades bancarias llevan años ofreciendo servicios y productos financieros que, si bien podían satisfacer varias necesidades económicas esenciales, no terminaban de cumplir con toda la demanda de los usuarios. No obstante, desde hace unos años han empezado a brindar nuevas propuestas que están atrayendo más que nunca a sus clientes.
Sin duda, las más interesantes están siendo las cuentas remuneradas. Estas, que ofrecen a sus poseedores un interés por dinero ingresado de forma automática, están ayudando a aumentar la capacidad de ahorro, a disponer de mayor liquidez. De hecho, su fórmula está funcionando tan bien que están empezando a ganar más y más terreno en el mercado.
¿Por qué se están popularizando las cuentas remuneradas?
La respuesta más obvia para explicar este fenómeno es la rentabilidad. Estas cuentas hacen que el dinero ingresado crezca, aunque lentamente, dando una mayor seguridad a quienes las usan. Son especialmente interesantes para quienes buscan sacar más rendimiento a su dinero sin arriesgarse a invertir en bolsa.
El mercado global actual está en una situación muy turbulenta. Tanto, que los inversores están buscando otras opciones para que su dinero crezca, y se están topando con estas cuentas que dan seguridad y crecimiento. Quizá a un ritmo diferente, pero lo dan sin peligros.
Por otra parte, cabe destacar que este tipo de cuentas suelen dar un mayor porcentaje de intereses y liquidez durante el primer trimestre aproximadamente. Después se reduce el tipo, pero está ahí haciendo que el ahorro se mueva y permitiendo a las personas tener la tranquilidad de que su dinero está “trabajando” para aumentar, no para disminuir.
Otro punto especialmente favorable es que su rentabilidad ha superado a la de los depósitos. Sin ir más lejos, la Cuenta Nómina de Bankinter brinda una rentabilidad del 5% en el primer año que baja al 2% en el segundo. Comparando con las cuentas de depósito, la más cercana es de Progetto, que se queda en un interés del 1,56%. La diferencia es abismal.
De hecho, eso es lo que más está impulsando el auge de este servicio de algunas entidades. No solo hace que el ahorro aumente, sino también logra que lo haga a un ritmo más acelerado que cualquier otra opción segura.
En la actualidad, algunas de las cuentas remuneradas más contundentes son la del BBVA, sin comisiones ni penalizaciones; la de Bankinter que hemos detallado ya; la del Banco Sabadell, sin comisiones y con un 1% TAE durante el primer año; o la de Raisin, con un fondo de garantía de depósitos y una rentabilidad del 1,46% TAE.
El abanico está abierto y las opciones están sobre la mesa. Las familias, ahora más que nunca, están intentando asegurar su futuro haciendo que sus ahorros crezcan por sí solos, sin tener que hacer sacrificios y con el apoyo de sus bancos. Las cuentas remuneradas están ahí, ofreciendo exactamente lo que necesitan, y cada vez con mejores prestaciones.