Mucha gente asocia la fabricación de whisky con Escocia, Irlanda y EE.UU., pero desconoce que también se hace en otros lugares como Japón. La fabricación del whisky japonés es reciente a comparación de otros países, comienza a inicios del siglo XX, pero su calidad es excelente.
Prueba de ello, es que hay diversas variedades japonesas de esta bebida alcohólica que han ganado el prestigioso premio World Whiskies Award o WWA, el equivalente a los Emmy o los Oscar, pero en este caso de los whiskies.
La bebida que ganó este premio es la variedad Hakushu de 25 años que ha recibido el honor de ser el mejor whisky del mundo en 2018 y 2020 en la categoría de Best Single Malt, es decir, un malta puro realizado por una sola destilería.
Esta categoría es la más importante de todas y la que tiene el título honorífico de nombrar al mejor whisky del mundo. Y eso no es todo, otras variedades de whisky nipón japonesas como la Chichibu Ichiro’s también han sido premiadas por los WWA y otros concursos similares.
Pero, ¿cómo es posible que un whisky nipón tenga un nivel superior a uno escocés cuando siempre se han considerado los mejores y los principales productores?
¿Qué es el whisky japonés y por qué tiene tanta calidad?
Para responder a la pregunta anterior hay que entender un poco de la historia del whisky japonés, sus variedades y el éxito de sus bebidas.
El whisky japonés es una bebida destilada que copia la fórmula original descubierta por los escoceses y los irlandeses en el siglo XV. Se elabora a partir de la destilación de cereales como la cebada y el trigo y se deja reposar durante varios años en barricas de madera.
Se considera que el whisky es originario de Escocia e Irlanda y su elaboración puede variar en cuanto a sus ingredientes y sabor exactos, aunque el procedimiento es, básicamente, el mismo; destilación de cereales y su posterior añejo en barriles.
La historia del whisky nipón comienza a partir de la apertura comercial de Japón con otros países a partir de 1853. No obstante, no sería hasta inicios del siglo XX, en 1916 cuando Masataka Taketsuru viajó a Escocia y copió el proceso de elaboración del whisky escocés.
Con el paso de los años surgieron otras marcas niponas dedicadas a la producción de esta bebida alcohólica.
En la actualidad, existe una gran variedad de whiskies japoneses y todas ellas gozan gran fama y popularidad.
Esto se debe al nivel de exigencia que tienen los japoneses a la hora de producir cualquier cosa. Si a esto le sumamos el uso de ingredientes de primera, por ejemplo, el agua que proviene de los Alpes Japoneses, una zona montaña de origen volcánico que tienen unas aguas de excelente calidad.
Por todos estos motivos, no es nada raro que los japoneses hayan conquistado el mercado y produzcan algunos de los mejores whiskies del mundo. Pero, ¿cómo elegir el mejor whisky japonés?
¿Cuáles son las variedades de whisky japonés más populares del mercado?
Tanto si buscas un whisky menos intenso y más matizado o uno más añejo, debes conocer cuáles son las variedades que existen de whisky japonés para escoger la que mejor se adapte a tus gustos y necesidades.
Los nipones han copiado la receta de esta bebida alcohólica al más puro estilo escocés y le dan el mismo protagonismo a la cebada, de esta forma, existen 5 variedades de whisky japonés que son las siguientes:
- Single malt o puro de malta: esta bebida se realiza en una sola destilería y es la más pura de todas las variedades de whisky. Lo normal es que se añeje durante un tiempo mínimo de 3 años. Un ejemplo de esta variedad es el Kurayoshi Puro Malta que reposa hasta 12 años en barricas de roble blanco.
- De grano o single grain: la característica principal de este whisky es que solo usa un tipo de grano para su producción como puede ser el trigo o el maíz.
- Blend malt o mezcla de malta: se trata de una variedad que mezcla maltas y granos lo que le da un sabor muy característico a la bebida.
- Blended grain o mezcla de granos: es un whisky que combina a la perfección distintos granos. Suele ser un tipo de whisky más barato que otras variedades.
- Blended scotch: este whisky es una mezcla de varios whiskies puros de malta que se han destilado en diferentes sitios. La combinación de diferentes variedades le aporta menos intensidad, pero más sabor.
Algunas de las marcas más conocidas son Suntory (responsable de Hakushu), Matsui y Kurayoshi, entre otras.
Las diferencias entre un whisky japonés y un escocés son mínimas, ambos se producen de la misma forma y saben casi igual. Lo único es que los ríos japoneses tienen menos turba y son ligeramente menos ahumados. Eso sí, todo depende de cada fabricante.
Lo cierto es que el mercado y la producción de whisky nipón no tiene nada que envidiar a otros mercados como el estadounidense o el escocés. De hecho, no es nada fácil escoger un whisky japonés, merece la pena probar todas y cada una de las variedades que hay en el mercado, especialmente si eres amante de esta bebida alcohólica.