Más de 236.000 personas mueren anualmente por ahogamiento, una de las principales causas de muerte entre las personas de uno a 24 años, y la tercera causa de muerte por lesiones en todo el mundo, según ha avisado la Organización Mundial de la Salud (OMS).
La mayoría de las muertes por ahogamiento, más del 90 por ciento, se producen en países de ingresos bajos y medios, y los niños menores de cinco años son los que corren mayor riesgo. Estas muertes suelen estar relacionadas con actividades cotidianas, como bañarse, recoger agua para uso doméstico, viajar en barcos o transbordadores y pescar.
«Cada año, en todo el mundo, cientos de miles de personas se ahogan. La mayoría de estas muertes se pueden prevenir mediante soluciones de bajo coste y basadas en pruebas», ha dicho el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus.
La Organización Mundial de la Salud ha recomendado seis medidas basadas en la evidencia para prevenir los ahogamientos, que incluyen la instalación de barreras que controlen el acceso al agua y la formación de los transeúntes en técnicas seguras de rescate y reanimación. También hay que enseñar a los niños en edad escolar técnicas básicas de natación y seguridad en el agua, y proporcionar a los niños y niñas guarderías supervisadas.
Otras medidas exigen que se establezcan y apliquen prácticas seguras de navegación, reglamentos sobre embarcaciones y transbordadores, y que se mejore la gestión del riesgo de inundaciones. Del mismo modo, la OMS insta a las personas a compartir con sus familia y amigos los consejos sobre prevención de ahogamientos y seguridad en el agua.
También les ha animado a que se apunten a clases de natación o de seguridad en el agua, o a que apoyen a las organizaciones benéficas locales o a las que trabajan en la prevención de ahogamientos. Mientras tanto, los grupos pueden hacer su parte, por ejemplo, organizando eventos públicos para compartir información sobre seguridad en el agua o lanzando campañas de seguridad en el agua.
La OMS también propugna la adopción de medidas a nivel gubernamental, como la elaboración o el anuncio de nuevas políticas, leyes o inversiones en materia de prevención de ahogamientos, y el apoyo a programas de prevención de ahogamientos, ya sea a nivel nacional o internacional.