Las alitas de pollo fritas son de los platos preferidos por los niños; y por qué no admitirlo, también de los adultos. Prepararlas es de lo más sencillo y con unos pocos ingredientes puedes tener una cubierta crocante y deliciosa.
Si quieres preparar unas alitas de pollo que sean una verdadera delicia, tienes que quedarte a conocer esta sencilla receta en la que con pocos ingredientes y siguiendo un par de trucos, tendrás no solamente alas crujientes, sino también tiernas y deliciosas.
1Aplica este truco para tener alitas de pollo fritas, crujientes y jugosas
Para comenzar con la preparación de unas alitas de pollo fritas, lo primero que debes hacer es limpiarlas muy bien y retirar, si las tiene, aquellas plumas que por lo general quedan adheridas a la carne.
Una vez que retires las plumas, pon 800 gramos de alitas dentro de un bol y cúbrelas con leche; sí, tal como lo lees cubrirlas con leche, es un truco estupendo que las hará quedar más jugosas en su interior, mientras que con el rebozado perfecto, estarán crujientes y de vicio total. Una vez en el bol, cubre este con papel film y deja reposar por 20 minutos.