La pizza a los cuatro quesos suele ser preparada por los italianos con mozzarella, gorgonzola, fontina y parmesano, cuatro quesos que combinados entre sí le otorgan una majestuosa cremosidad, aroma y sabor. Al llevar esta exquisita combinación de quesos (que pueden cambiar en algunas regiones), la masa toma un protagonismo especial, y formar una base fina y crocante se convierte en una regla casi obligatoria para tener un resultado sencillamente espectacular.
Si deseas hacer una pizza a los cuatro quesos y disfrutar de toda la cremosidad de su superficie y la textura crujiente de la base, acompáñame a conocer esta receta, que te dará como resultado la masa más divina que te puedas imaginar.
2La importancia de una buena base: la masa de la pizza
Ya que diferentes cocineros alrededor del mundo tienen su propia forma de preparar las masas, no existe una base única para pizza. Sin embargo, los ingredientes son básicamente los mismos y en parecidas proporciones, variando solamente el grosor de la masa.
El grosor de la base por lo general depende del gusto personal. No obstante, te recomiendo que, en el caso muy específico de la pizza cuatro quesos, utilices un grosor fino para que la masa quede muy crujiente. Esto hará que la combinación de texturas y consistencias te eleve a las nubes.