Joan Laporta realmente ha tratado de hacer lo que mejor ha podido con el FC Barcelona. Una entidad que está en crisis no se explica en sí como ha podido recuperar un poco su oxígeno en este período de fichajes. Y aun cuando hayan sido las palancas económicas una de las grandes salvaciones del conjunto blaugrana, sin duda ha habido más gestión interna que por supuesto levantó al equipo. Aun así, los malos números siguen siendo su peor pesadilla, y de ahí derivan las pifias en este verano.
5La gestión de Laporta ha ido mejorando paulatinamente
Laporta no lo ha hecho mal en este período, pero tampoco lo ha hecho bien. Es decir, se mantiene todavía en esa línea del acierto y desastre. Pese a ello, la afición le ha estado dando quizás un voto de confianza, porque el final de la temporada fue bueno, dentro de lo que cabe.
Se aferraron a la segunda plaza en España. Y si bien fracasaron en los compromisos internacionales, era algo que se veía venir por la falta de estrellas en el once, que medianamente pudo construir el de Tarrasa con lo poco que le habían dado.