Una de las cosas a las que hemos empezado a tenerle miedo es a la factura de la luz del fin de mes, y es que últimamente los incrementos en las tarifas de energía eléctrica han dejado seco a más de uno y hay que pensar que viene el invierno y que si en verano ya nos costó un pastón mantener la casa fresquita, sólo nos podemos imaginar cuanto nos va a costar mantenerla caliente en la época más dura del frío.
Tal como han estado ocurriendo las cosas, si hemos tenido uno de los veranos más calientes en muchos años, entonces es probable que también tengamos uno de los inviernos más crudos de los últimos tiempos, de modo que ya estamos pensando en alternativas que nos permitan ahorrar en electricidad y mantener el hogar calentito. Que si estufas de queroseno, que si chimeneas de leña, pero como la tecnología no querido quedarse atrás, ahora tenemos bombillas con WiFi.
1¿Qué es una bombilla con WiFi?
Se trata de unas bombillas inteligentes, que pueden ser controladas desde un dispositivo o teléfono móvil, o por cualquier asistente inteligente de voz que podamos tener en casa como Alexa, Siri o Google Home, con las cuales se pretende ayudarnos en nuestras labores del día a día, facilitado el apagado y el encendido de las luces, haciéndolo de manera automática.
Pero también las labores que no sean cotidianas como iluminar una habitación con determinados colores que se pueden crear de forma sencilla. No obstante, ¿esas comodidades representan o no un incremento en la factura de la luz?