El café esconde sus secretos más allá de su aroma, sabor amargo y efecto estimulante. Lo más habitual que solemos hacer es tirar los posos del café a la basura orgánica. Sin embargo, cuando hacemos un café debemos saber que el poso que queda puede tener su utilidad y es por eso que hoy queremos informaros sobre sus posibles uso para sí aprovechar aún más el producto. Para que te hagas una idea, solo en España se llega a tirar más de 150 millones de kilos de residuo de café al año. Estos residuos, en realidad, pueden ayudarnos a mejorar nuestra calidad de vida además de que usándolos estamos ayudando al medio ambiente.
6Ahuyenta a las hormigas y a otros tipos de insectos
La broza de café también se puede utilizar para este tipo de objetivo y es que puede ayudarte a combatir las dichosas plagas. Se puede utilizar para hormigas, caracoles, etc. Eso sí, debemos de tener cuidado si tenemos un gato ya que estos no soportan el olor a café.
Lo que tienes que hacer es poner un saco con los restos del café en puntos estratégicos de la casa para que así las hormigas no entren y evitar tener que utilizar después insecticidas.