El olor al zumo de naranja en las mañanas nos ha acompañado durante toda nuestra vida. Desde hace décadas nos ha sido recomendado tomar zumo de naranja con el desayuno y es por eso que prácticamente en todos los hogares se consume a diario. Si fuera fresco sería mucho mejor, pero gracias a la industrialización, se puede comprar en el súper en el volumen que necesitemos, de un litro, de dos litros, de galón, concentrado congelado para diluir, en fin, lo puedes encontrar de la forma en que sea más práctico para ti consumirlo en casa.
Pero te puedes creer que probablemente esa costumbre esté llena de mitos y verdades que tienes que conocer, por eso vamos a comentarte en este artículo algunos mitos que han sido derribados por los estudios recientes.
8Segunda Verdad: El zumo de naranja natural contiene muchos nutrientes y ayuda a que el organismo asimile otros
Además de la vitamina C, un vaso de zumo de naranja contiene veinte gramos de micronutrientes, entre los que se encuentra el folato, que contribuye con el crecimiento de los tejidos maternos en el embarazo, ayudando también a que el sistema inmune funcione normalmente. El folato contribuye a reducir la fatiga y el cansancio. Además contiene potasio, que ayuda a que los músculos funcionen normalmente y ayuda a la presión sanguínea, manteniéndola estable.
Igualmente, contiene fitonutrientes desconocidos, que trabajan de forma sinergética con la vitamina C, que hacen que se asimile de mejor forma otras propiedades nutricionales de frutas y vegetales.