Gran parte de la población rural de España se encuentra vacía. Se trata de un problema de despoblación que afecta a todo el país desde hace décadas, pero que se ha incrementado con el paso de los años hasta llegar a la situación actual, en la que la mayoría de la gente decide acomodarse en las principales urbes.
Por ese motivo, y para repoblar ciertos lugares de la llamada “España vaciada”, muchos pueblos no solo pretenden emprender medidas atractivas de cara a los posibles futuros vecinos, sino que incluso ofrecen incentivos económicos para motivar a la gente joven.
6Buscando soluciones
Uno de los casos que mejor simboliza estas nuevas medidas para atajar la cuestión es la que ha tomado Ponga, en Asturias. En vista de lo delicado de su situación de cara al futuro, ha decidido parar 3.000 euros a aquellas parejas que decidan mudarse allí. De forma definitiva, se entiende.
Además, para que la cosa continúe y no sea algo puntual, los incentivos también incluirán otros 3.000 euros, la misma cantidad de dinero, por cada hijo que estas nuevas parejas tengan en el pueblo. Como se suele decir, los niños vienen con un pan bajo el brazo. En este caso, no hay dudas al respecto.
