Antes de comenzar Wimbledon 2022 el torneo ya estaba metido en tremendo lío. La organización del tercer Grand Slams del año -que se juega sobre hierba-, tomó la decisión de no repartir puntos para el ranking mundial y, aparte de eso, le dio un duro mazazo a los tenistas rusos y bielorrusos, quienes fueron automáticamente descalificados de la cita londinense. Ahora, el torneo más prestigioso del calendario de la ATP y WTA, tiene que pagar las consecuencias de sus medidas unilaterales, las cuales fueron netamente políticas y van en virtud de lo que quiso imponer el Gobierno británico en el referido evento mundial.
2Contra las cuerdas y han de pagar una cifra millonaria
Wimbledon y la Federación británica de tenis son los principales culpables de todo el show mediático que se ha armado en torno al campeonato que arriba a su edición número 135. Y es que, estos fueron los que tomaron la medida de relegar a dichos jugadores y dieron la estocada al no dar puntos para la clasificación mundial.
Un hecho inédito para un evento que sí es riguroso con las normas, pero jamás se habían atrevido a tanto. Pero la venganza es un plato que se come frío, y ahora les dan jarabe de su propia medicina, producto de una suma millonaria que le cargan a ambas instituciones.