Existen combinaciones de sabores que resultan una apuesta segura para cualquier ocasión. Las costillas con miel y mostaza son una auténtica delicia, pero además cuentan con otra gran ventaja: resultan sencillas de preparar, y no ocupan demasiado tiempo. Incluso se puede atender a otros asuntos mientras se cocinan en el horno.
A continuación te contamos cómo deben prepararse para que queden realmente increíbles. Así podrás disfrutar de una comida fantástica ideal para celebrar este verano con tu familia o amigos.
10La calidad de los ingredientes
Como se puede apreciar al leer este artículo, hacer unas costillas con miel y mostaza no es complicado, pero muchas veces lo más importante para conseguir que estén genial pasa por la calidad.
Más allá de la carne, hay que elegir bien la mostaza de Dijon y una miel de calidad.