Existen muchísimas formas de preparar el pollo, uno de los alimentos más comunes en el día a día de muchas personas. Pero si lo que buscas es una manera de potenciar todo su sabor, y llevar a cabo una receta sofisticada pero sencilla de llevar a cabo, puedes elegir guisarlo al vino tinto.
Aunque pueda parecer algo bastante común, los resultados de cocinar pollo al vino tinto suelen ser muy apreciados, por lo que resulta una alternativa interesante para cualquier situación, tanto en el día a día como en momentos más relevantes, ya sea con la familia o los amigos. Te contamos todos los detalles sobre su elaboración.
4¿Qué parte del pollo usar?
La mayoría de recetas que tienen que ver con el pollo permiten, por así decirlo, una cierta libertad para que cada cocinero aproveche la parte que más le agrade del animal. Y lo mismo sucede cuando este se guisa acompañado de vino tinto.
Por lo general, puede usarse lo que se prefiera, pero por regla general son los muslos o los cuartos traseros del pollo las partes más utilizadas para elaborar este plato. Aunque al final depende en gran medida de las preferencias o las necesidades de cada persona que vaya a ponerse manos a la obra. También puede usarse pechuga, sin ir más lejos.