Hay muchas personas que no han podido dejar un feo hábito infantil que consiste en morderse las uñas, especialmente cuando se encuentran sometidos a situaciones muy agobiantes o que les producen un nivel elevado de estrés, pero el problema es que este hábito hace que nuestras manos luzcan desprolijas y poco atractivas, por no decir feas en casos extremos, de manera que es necesario que dejemos definitivamente esta costumbre.
10Busca un sustituto para la compulsión
Cuando tengas ganas de morderte las uñas, puedes sustituir esa compulsión por comerte una barrita energética, de modo que no sólo las manos si no tu boca estarán ocupados, así que no te morderás las uñas. Otra buena opción para mantener la boca ocupada es masticar chicle.