Especias, fuego, un gran plato, sal y de pronto al probar, el gran desastre: se te ha ido la mano y terminas con una comida más salada que las aguas del mar muerto. Ante esta experiencia suele surgir la desesperación de forma inmediata y lo primero que viene a la cabeza es pensar que se ha perdido todo; sin embargo, no llores aún, pues hay maneras de rescatar el plato y aquí te contaremos algunos trucos para el rescate final del plato.
8Vinagre de manzana
El vinagre de manzana es también uno de los elementos utilizados para eliminar el exceso de sal de los alimentos; y tal como en el caso del zumo de limón, es especialmente recomendado para ser añadido en el arroz.
Simplemente, añade un poco de vinagre de manzana y remueve bien. De esta manera equilibras la sal gracias al ácido acético presente en el vinagre. Evita excederte al añadirlo.