El Real Madrid y Barcelona son eternos rivales dentro y fuera de la cancha. Sin embargo, ya están saneados en eso que le llaman «traiciones», porque saben que en el fútbol se puede esperar de todo. Ya lo han vivido muchas veces, y un ejemplo más reciente por lo menos para los merengues es el caso de Kylian Mbappé. El galo finalmente decidió quedarse con los del PSG y dejó plantado a Florentino Pérez y a la afición. ¿Se vendrá un nuevo episodio similar?
6No cree en las traiciones y se ofrece al Real Madrid
En el fútbol siempre ha existido ese calificativo de traición cuando se ficha para el equipo rival. Pero a Dembélé no le causa problema alguno que lo lleguen a señalar de esa forma. Porque en ese caso, está buscando mejorías en su carrera (y eso es más que respetable ya que cualquiera lo haría).
Además, el haber estado con los culés por cinco años tampoco le genera algún tipo de rechazo hacia otra entidad, puesto que siempre hay que ser profesionales y jugar donde sea mejor. Así es como el Real Madrid se sorprende por lo que le ha llegado recientemente sobre el galo.