Los llamados reality shows continúan gozando de buena salud dentro del particular universo televisivo. Aunque no son apreciado por todos (y generalmente criticados por los paladares más selectos), la realidad pasa porque sus distintas propuestas, orientadas a según qué públicos dependiendo de la naturaleza del espacio, siguen siendo un pilar básico de la pequeña pantalla actual.
Un ejemplo de ello puede considerarse La isla de las tentaciones, cuya quinta temporada ya empieza a tomar forma.
10Polémicas varias
Por otro lado, durante las cuatro temporadas no han faltado las habituales polémicas, propias y ajenas: filtraciones, comportamientos supuestamente indecorosos, acusaciones varias, etcétera.
Si esto es algo que afecta de manera positiva o negativa a un reality show como La isla de las tentaciones, es algo que solo la audiencia tiene la capacidad de juzgar. Por el momento, este tipo de situaciones parecen solamente haber incrementado si cabe el interés de los espectadores.