La paella es uno de los platos tradicionales con más amantes en nuestro país. De hecho, es uno de los platos que representa a España en cualquier parte del mundo. Y es que probar una buena paella es un verdadero placer para todos los sentidos. Incluido dentro de la dieta mediterránea, es un plato saludable y variado que nos aporta energía y multitud de nutrientes. Y, sin embargo, pese a que podamos pensar lo contrario, no es apto para todo el mundo. De hecho, hay personas que deberían tener mucho cuidado con su consumo.
6Cuidado con el socarrat de la paella
Pero más allá de los peligros que supone para las personas diabéticas, existe otro riesgo en el consumo de la paella. Más concretamente en una de las partes más deliciosas de la misma para una inmensa cantidad de comensales, el socarrat. Nos referimos a esa capa de arroz que se queda tostado en el fondo de la paellera si se elabora siguiendo los protocolos de la paella valenciana. El proceso de conseguirlo no es sencillo, pues tiene que lograrse un toque de sabor tostado que si se nos va de las manos derivará en un sabor quemado para todo el arroz.