Rafa Nadal ha hecho un pacto con Roland Garros, porque hasta con el pie malo lo gana. Sin embargo, cada día duele más y es más intenso todo lo que tiene que aguantar para alcanzar sus triunfos. Una tarea titánica a sus 36 años de edad. Aunque él mismo dijo que cambiaría una «Copa de los Mosqueteros» con el hecho de tener un pie nuevo. Ahora que el mallorquín ha superado la arcilla, prevé un tratamiento con el fin de regresar nuevamente a las pistas.
4París le exigió mucho a Rafa Nadal
Fueron dos semanas intensas en París que exigió al máximo a Rafa Nadal. Sabe que su pie en algunos partidos le hizo un mal presagio, pero al final solventó. Pese a ello, no puede avanzar de esta forma, porque estaría dejando de disfrutar lo que más le gusta hacer y es saltar a la cancha.
Entendiendo que su pie necesita ser tratado nuevamente, aludió que continuará jugando; pero en caso de que sea necesario operarse, lo hará. Eso implica parón y hasta un adiós definitivo, que nadie quiere, en realidad.