El bloque al petróleo ruso ha provocado que se tengan que buscar otras fuentes de crudo. Para evitar que esa reducción de la oferta aumenta aún más el precio del barril, países como Estados Unidos están instando a las naciones petrolíferas a que aumenten la producción. Incluso han permitido que se incorporen al mercado mundial algunas como Venezuela.
El presidente venezolano, Nicolás Maduro, ha anunciado que las autoridades estadounidenses han emitido licencias para que las petroleras Repsol, Chevron y Eni puedan exportar petróleo y gas natural de Venezuela.
«Se están dando pasos, los primeros pasos. Estados Unidos hace una semana, más o menos, dio unos pasos leves para significativos al entregar licencias a las empresas Chevron de Estados Unidos, Eni de Italia y Repsol de España para iniciar los procesos que los lleven a producir petróleo y gas en Venezuela para exportar a sus mercados naturales«, ha explicado Maduro.
«Son pasos leves, pequeños. Venezuela tiene la primera reserva internacional certificada de petróleo del mundo«, ha apuntado el mandatario venezolano en una intervención en la televisión venezolana.
Además, Maduro ha recordado que Venezuela tiene importantes reservas de hidrocarburos. «El petróleo que necesita este mundo para funcionar está aquí en Venezuela y nosotros en paz y en soberanía tenemos todo el marco jurídico para levantar, aceptar inversiones«, ha subrayado.
Hace dos semanas el Departamento del Tesoro emitió una licencia a Chevron, la única gran petrolera norteamericana que sigue operando en el país sudamericano, para llevar a cabo conversaciones para un posible reinicio de la producción, que había cesado bajo las sanciones de Estados Unidos.
Esta licencia podría suponer un alivio de las sanciones petroleras, dependiendo de la cooperación del Gobierno venezolano, según altos funcionarios estadounidenses citados por el diario ‘The Washington Post’.
Washington impuso en 2019 sanciones sobre el petróleo venezolano, como represalia por las elecciones presidenciales de 2018. Venezuela produce actualmente unos 800.000 barriles de crudo al día, lejos de los tres millones que mantuvo durante años. La guerra en Ucrania y el embargo impuesto a Rusia habrían propiciado un cambio en estas sanciones.