Si has disfrutado de todo el sabor de una deliciosa crema de calabaza dulce, debes saber que el sabor es de otro nivel y que el toque dulzón se disfruta a más no poder. Ahora bien, si te preocupa un poco el hecho de tener que añadirle un poco de azúcar, puedes estar tranquilo, ya que te contaré cómo la puedes disfrutar muy rica, cremosa y dulce, tal como te gusta, pero sin nada de culpa y sin una pizca de azúcar.
Quédate a conocer los trucos para tenerla con un sabor de impacto y enamora a todos con esta receta que los dejará encantados.
1Cómo elegir la calabaza para que sea muy dulce
No todas las calabazas que consigas en el mercado te darán el mismo resultado dulce y delicioso; y debes saber que mientras más anaranjadas lucen, su sabor es más meloso.
Si tienes la posibilidad de comprarla troceada, observa muy bien su color, mientras que, si consigues las calabazas enteras, mientras estas luzcan más compactas y liberen un olor dulzón, sabrás que te encuentras frente a una de gran sabor.
Escoge aquella que tenga la piel lisa, sin magulladuras y sin áreas secas o agrietadas y guíate siempre por el apenas notable aroma que podrás percibir cuando están bien maduras y dulces.
