El bizcocho genovés es todo un clásico de la repostería; sin embargo, todo parece indicar que en momentos de carestía, es que lo recordamos y sacamos a relucir. Lo cierto es que este bizcocho, que no contiene materia grasa ni levaduras químicas, es todo un éxito y bien que vale la pena prepararlo, sobre todo cuando tienes pensado humedecerlo con algún almíbar, o cubrir con alguna crema húmeda.
Este tipo de bizcocho se luce con mermeladas, dulce de leche, siropes y ni hablar de las frutas frescas o en almíbar, con las que suele tener una estrecha relación para la preparación de los más divinos troncos.
8Yemas y azúcar
Una vez que tengas las claras perfectamente montadas, pasa a batir las yemas junto al azúcar. El proceso de batido de las yemas junto al azúcar, debes hacerlo hasta que la mezcla esté lo suficientemente suave y haya crecido su tamaño.
Una de las señales que te anuncian que las yemas están perfectas, es que podrás observar que la mezcla luce de dolor blanquecino y que, además, ya no se sienten los granitos de azúcar cuando tomas un poco de mezcla entre tus dedos.