El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, asistirá este martes al 27 Congreso del Partido Popular Europeo (PPE) que se celebra en Rotterdam, en el que se elegirá presidente de esta familia política europea al alemán Manfred Weber, en sustitución del polaco Donald Tusk. La nueva dirección contará en su equipo con el eurodiputado valenciano Esteban González Pons, que ocupará una Vicepresidencia, pero esta incorporación conlleva la salida del navarro Antonio López-Istúriz de la Secretaría General del PP, un puesto en el que lleva 20 años.
Se trata del primer viaje internacional de Feijóo desde que fue elegido presidente del PP el pasado 2 de abril en Sevilla y allí defenderá una política de «máximo respeto» a las instituciones y compartirá el plan económico basado en rebajas fiscales a las rentas medias y bajas en España para frenar la «desbocada» inflación, así como una mayor eficiencia en el uso de los fondos comunitarios y del gasto público, según fuentes de su equipo.
Durante estos dos días en Rotterdam, Feijóo intervendrá ante el plenario y mantendrá encuentros con una decena de líderes europeos, como los primeros ministros de Grecia, Kyriakos Mitsotakis, o de Rumanía, Nicolae Ciuca. Además, se verá con el exprimer ministro polaco Donald Tusk y celebrará citas bilaterales con representantes de los partidos hermanos en Alemania, Francia o Países Bajos.
PONS SE ENCARGARÁ DE FONDOS EUROPEOS Y RELACIONES CON LATINOAMÉRICA
Weber contará en su equipo con el eurodiputado valenciano Esteban González Pons, actual vicesecretario de Institucional del PP y una persona de máxima confianza de Feijóo. Ocupará una de las diez vicepresidencias del PPE y su labor estará centrada en las relaciones con Latinoamérica y Estados Unidos, incluyendo además competencias relativas a la supervisión de la gestión de los fondos europeos.
Sin embargo, la entrada de González Pons conlleva de facto la salida de otro español de la Ejecutiva, ya que el eurodiputado navarro Antonio López-Istúriz dejará la Secretaría General del Partido Popular Europeo, un cargo que ocupa desde marzo de 2002 y en el que aspiraba a ser reelegido hasta 2024, según han señalado fuentes de su entorno.
El PP español ha contado con la Secretaría General del PPE desde poco antes del año 2000, cuando el entonces presidente del Gobierno José María Aznar negoció ese cargo para Alejandro Agag, a quién luego sustituyó López-Istúriz.
Weber ha sido el único candidato a la Presidencia del PP, tal y como se confirmó el pasado sábado. Aparte de Pons, son candidatos a vicepresidente: Esther de Lange (Holanda); Mariya Gabriel (Bulgaria); Johannes Hanhn (Austria); Andrzej Halicki (Polonia); David McAllister (Alemania); Siegfried Muresan (Rumania); Petteri Orpo (Finlandia); Franck Proust (Francia); Dubravka Suica (Croacia); y Antonio Tajani (Italia).
Aparte de 10 vicepresidentes, el congreso de Rotterdam también elegirá a un tesorero, cargo al que aspiran Paulo Rangel (Portugal); y Tomás Zdechovsky (Chequia). Fuentes del PP han señalado que Weber quiere introducir cambios en la estructura y dar más competencias políticas a las Vicepresidencias.
UNA RESOLUCIÓN SOBRE UCRANIA
La guerra en Ucrania ocupará un lugar central en el congreso del PPE, que impulsará una resolución concreta en la que se urge a invertir en la soberanía estratégica europea tras la invasión rusa, con medidas para reforzar la defensa común, garantizar el suministro de alimentos en Europa o reorientar la política energética para acabar con la dependencia de las importaciones de combustibles fósiles de Rusia.
En materia energética, apuesta por diversificar el suministro de gas con inversiones urgentes en nuevas terminales de gas natural licuado, detener el cierre de las centrales de carbón durante un año o apostar por todas las fuentes de energía disponibles, incluida la nuclear, entre otras propuestas.
Además, está prevista la asistencia de varios miembros de la oposición ucraniana a este cónclave que se celebra en la ciudad holandesa como Yulia Tymoshenko; Petro Poroshenko y Vitali Klychko, han avanzado fuentes de la formación.
En su propuesta de resolución, bajo el título «Unidos en solidaridad con Ucrania: Defendiendo los valores europeos contra la guerra de Putin», el PPE subraya que la guerra de Rusia en Ucrania es «una amenaza» para las democracias occidentales; para la seguridad, prosperidad y valores de las democracias occidentales, así como para el propio orden internacional.
Por eso, apuesta por tomar medidas para fortalecer la arquitectura de defensa y seguridad o poner fin a las importaciones de combustibles fósiles que «financian el régimen de Putin». «La UE debe invertir en su soberanía estratégica, en su capacidad de actuación y en su capacidad de recuperación«, asegura, para añadir que también deben estar al lado de los países que aspiran a entrar en la Unión Europea, como Ucrania.
A su entender, la UE debe conceder a Ucrania el estatus de candidato a la UE e iniciar las negociaciones de adhesión «sin demora». El PPE cree que esto puede lograrse ya en el Consejo Europeo de junio de 2022, lo que supondría un «oportuno mensaje al pueblo ucraniano en su lucha por los valores europeos y mostraría una clara señal de apoyo y asistencia de la UE al valiente pueblo ucraniano que defiende no sólo su país sino toda Europa».