¿Te has preguntado qué es la realidad? Lo cierto es que esta es una pregunta trascendental, y por esa misma razón resulta muy complejo explicarlo y desde que existe la humanidad, se ha tratado de dar respuesta a esta pregunta, pero la realidad es un concepto que puede ser objetivo y al mismo tiempo subjetivo, y cuando nos metemos en el mundo del subjetivismo, entonces pueden haber tantas respuestas como intérpretes.
¿Quieres aproximarte al concepto filosófico de la realidad? Entonces quédate con nosotros unos minutos más, para que puedas entender cómo puedes aproximarte a la respuesta a esta pregunta y quién sabe si llegas a tu propio concepto filosófico de la realidad desde tu perspectiva particular.
¿Qué es la realidad?
De una manera un poco intuitiva, todos sabemos que cuando nos referimos a la realidad, estamos hablando de algo que tiene una existencia que se puede comprobar, medir, que ocurre en verdad, pero la realidad se trata de un concepto que es abstracto, y desde el punto de vista filosófico es un concepto que se aproxima más a “lo que es real”, un concepto que se ha relativizado con la llegada de la realidad virtual.
Llevando el pensamiento filosófico hacia algo más trascendente, podríamos decir que la realidad es lo que está fuera de un individuo, esto es, lo que forma el mundo exterior, por contraposición al mundo interior del ser humano, que es lo que entendemos por el “yo”.
¿Cómo ve la filosofía a la realidad?
La filosofía ve a la realidad por medio de la diferencia que existe entre lo que se encuentra fuera del ser humano, que puede ser percibido por medio de los sentidos, y lo que se encuentra dentro del ser humano, su mundo interior, conformado por la razón y el pensamiento, y eso ha sido así desde la filosofía de los antiguos, quienes comenzaron por proponer distintas maneras de llamar a lo de adentro y a lo de afuera, para poder entender las diferencias. De esa forma nacieron las distintas corrientes filosóficas clásicas.
Platón
Fue un filósofo griego de la antigüedad, quien propuso el mito de la caverna, para poder ilustrar la relación que se tiene con la realidad, haciendo mención de un experimento hipotético en el que un grupo de esclavos que habían nacido en el interior de una cueva de la que no podían salir, y que tampoco podían moverse, siempre dando la espalda a la puerta.
En este experimento hipotético, la luz que podía provenir desde fuera o desde una fogata, se filtraría hacia el interior de la cueva, lo que proyectaría sombras de diversos objetos que otros esclavos que se encontraban fuera de la cueva estaban transportando encima de sus cabezas.
Los que se encontraban dentro de la cueva confundirían las sobras con lo que era real, creyéndolas verdaderas, ya que por la limitación de percibir la realidad completa, serían incapaces de entender su verdadero significado, debido a que no pueden observar lo que ocurre detrás de ellos.
Taoísmo y las filosofías orientales
Para el pensamiento filosófico oriental, la exploración de lo que es real se hace mediante una aproximación mística, religiosa o metafísica a las cosas, mezclando la introspección propia de esas culturas con lo que los seres humanos percibimos a través de los sentidos.
Enmanuel Kant
Fue uno de los más destacados pensadores de lo que es real para el pensamiento occidental, y su filosofía consistía en distinguir como se percibe a lo que él llamaba el fenómeno noúmeno, que es aquel que está sujeto a condiciones subjetivas como los conocimientos, la sensibilidad, y otros atributos de la mente humana, del noúmeno en su mismo, que sería la propia cosa u objeto, sin ninguna clase de interpretación.
Esto dio pie a que muchos filósofos posteriores comenzaran a separar lo real del concepto de realidad, como Jacques Lacan, que pensaba que la realidad es lo que un individuo comprende o percibe de lo que es real, es decir, algo cercano a la opinión pública o al sentido común, entonces lo real sería lo que resta del mundo que no ha podido ser simbolizado, representado o comprendido.
¿Cuántos conceptos de realidad existen?
La respuesta es tantos como individuos, porque podemos decir que cada ser humano posee su propia realidad, de modo que no se trata de un concepto que sea único, ni puede ser entendido de una única manera, por lo tanto, existen muchos conceptos de realidad. Existe una realidad de la que formamos parte como individuos y de la que no formamos parte al mismo tiempo, otra realidad que vivimos por medio de la experiencia y de lo que se puede observar.
Entonces la verdadera pregunta sería ¿La realidad es aquello que percibimos, o se trata de algo más que se encuentra oculto y que no podemos ver? ¿La realidad es lo que podemos ver de ella o hay algo más que la conforma? Los filósofos han tratado de dar contestación a esta pregunta y han clasificado la realidad en varios tipos.
Realidad subjetiva y objetiva
Si volvemos a pensar en la realidad desde el punto de vista de la diferencia entre lo que está adentro y lo que está afuera del ser humano, es posible que hablemos de un realidad subjetiva y de una realidad objetiva.
La realidad subjetiva sería aquella que depende únicamente de lo que percibe individualmente cada sujeto, que conforma el mundo interior de cada sujeto. Allí se encuentran las evaluaciones subjetivas, los pensamientos, los deseos, las opiniones, así que la percepción de un mismo objeto o evento puede ser interpretado de maneras muy diferentes por cada individuo, ya que dependerá del punto de vista de cada quien.
La realidad objetiva, por el contrario, es la que se relaciona con los objetos de afuera, que son tangibles, que poseen existencia propia, diferente del individuo, que es observable y medible, por lo que su existencia puede ser comprobable de la misma manera por todos los sujetos, y que al poseer una existencia propia e independiente, seguirá existiendo a pesar de que no sea observada por nadie. Lo que caracteriza a la realidad objetiva es su permanencia en el tiempo y en el espacio, y que es posible que sea percibida igual por individuos muy distintos, en diferentes momentos.
Entonces la realidad es lo que percibimos a través de los sentidos, mientras que lo real vendía a ser el mundo que nos rodea, sea percibido o no por un individuo. Y es en esa construcción mental en la que creamos la realidad, dependiendo de nuestra experiencia y nuestros conocimientos.