Aunque no lo creas, se trata de un concepto que es esencial para la danza, de hecho, es probable que hayas asistido a unas clases o a una academia de danza y hayas escuchado la palabra kinesfera, y todavía estés pensando que quiere decir.
Hoy queremos enseñarte su significado y su importancia, como nació y como se emplea en la danza, para que podamos disfrutar de esos resultados tan maravillosos en los escenarios.
¿Quién inventó la kinesfera?
Fue Rodolf Laban, el creador de las escuelas de danza moderna en Europa Central. Se graduó de Arquitectura en l’Ècole des Baux Arts en París. Allí trabó conocimiento con la kinesfera y cómo podía ser aplicada en el proceso de realizar movimientos.
Todos los estudiosos de Laban coinciden en que se trató de una persona con muchas particularidades, que siempre estuvo interesada en ámbitos muy distintos, pero siempre con una misma finalidad, que fue el estudio del movimiento de los seres humanos. Sus hallazgos y conocimientos permitieron que las ideas de Laban no sólo se apliquen en la danza, sino en el deporte, en la antropología y hasta en la sociología, entre otras disciplinas y ciencias.
¿Cuál era la idea central de Laban?
Laban pensaba que el cuerpo humano debía pensarse como contenido en el interior de una esfera imaginaria, y que sus puntos de intersección con las direcciones conformaban las cúspides del cuerpo, por lo que hay algo de cubo y de esfera, a lo que él denominó icosaedro.
Cuando un ser humano se encuentra dentro de su icosaedro llevará a cabo sus pasos en tres direcciones, que son de adelante hacia atrás, de abajo hacia arriba y de derecha hacia la izquierda.
Entonces ¿Qué es la kinesfera?
Es el espacio que se encuentra alrededor de todo cuerpo humano, a modo de esfera de tipo tridimensional, que también es conocido con el nombre de espacio parcial. De modo que, si estiramos las extremidades de nuestro cuerpo, es posible trazar de forma imaginaria una circunferencia, teniendo en cuenta los puntos cúspides, tal como en el hombre de Vitrubio de Da Vinci, sólo que cuando nos desplazamos, la esfera se desplaza con nosotros.
¿Cuál es la relación entre la danza y la kinesfera?
La idea de Laban es que básicamente todo bailarín se encuentra contenido dentro de su kinesfera imaginaria, cuyo tamaño va a depender de la altura del bailarín. Ahora bien, dentro de toda kinesfera existe un poliedro, en que se unen las tres primarias direcciones, siendo la vertical la que nos da la sensación de tener equilibrio.
A los efectos de desarrollar su danza, cada bailarín ejecutará sus pasos dentro de su kinesfera personal, y la misma se desplazará en la misma medida en que lo haga el bailarín.
¿Cuáles son los tipos de espacio con los que se puede encontrar un bailarín?
- Personal: es el comprendido entre la epidermis y el interior del ser humano. Está relacionado con la intimidad, con el interior, con el dolor y las sensaciones. Es uno de los espacios que pasa más desapercibido.
- Parcial: es el comprendido entre la epidermis y el exterior, que se experimenta cuando un bailarín estira una extremidad.
- Total: cuando los dos anteriores se fusionan y nos acompaña en nuestra vida de todos los días, a todos los individuos, sean o no bailarines.
- Social: es el espacio en el que se desenvuelven las relaciones sociales entre los individuos, y la forma en que comparten sus espacios con otros.
- Escénico: es donde se encuentra el ojo del espectador, que va a analizar el ritmo del movimiento, su plasticidad, la expresión artística del bailarín que danza en un escenario.
Para Laban todo estaba contenido dentro de la kinesfera, tal como él decía “nuestros cuerpos desplazan el espacio, se mueven en el espacio y en movimiento en el espacio existe en nosotros mismos”.
¿Por qué es importante la kinesfera en la danza?
Porque no sólo determina el espacio dentro del cual se puede mover un bailarín, sino que determina también le permitirá no invadir el espacio o kinesfera de los demás bailarines. Ahora bien, si en una determinada coreografía se requiere que se fusionen las kinesferas de los que toman parte en una danza, entonces se dice que los bailarines están compartiendo la misma imaginaria kinesfera.
En este sentido, la kinesfera ayuda a que se armonicen los movimientos de los bailarines, a que se refuerce su sentido de equilibrio y a experimentar con el rompimiento de reglas y la trasgresión de espacios. Para lo cual Laban siempre pedía que se buscara una armonía entre el espacio y el movimiento.
¿La kinesfera se divide en niveles?
Si, de hecho la kinesfera puede dividirse en tres niveles, que son:
- Nivel alto: que se domina cuando un bailarín ejecuta saltos.
- Nivel medio: es el nivel en el que todos nos encontramos cuando caminando en cualquier espacio y en cualquier situación.
- Nivel bajo: este se puede observar cuando el bailarín se encuentra con el cuerpo extendió en el piso.
¿Con qué elementos cuenta la kinesfera?
De acuerdo con las ideas de Laban, los elementos de la kinesfera son tres:
- Espacio: es lo que se concibe partiendo del cuerpo de un individuo que se encuentra en movimiento y llega hasta donde se encuentren sus límites, en el entendido de que cada vez que el individuo se desplaza, los límites se modifican. Los movimientos quedan delimitados por el campo de acción de las extremidades en máxima tensión del cuerpo humano.
- Tiempo: que viene a definirse por la duración, la velocidad y el ritmo del bailarín. Cuando se combinan los tres, eso da mayor riqueza a los movimientos y a la expresión en la danza.
- Energía: Laban decía que era un elemento fundamental para expresar el movimiento. Está relacionado con que el individuo tome conciencia de su peso y de cómo puede vender a la fuerza de gravedad, variando la dinámica del movimiento, en función de cuta energía puede ser débil o fuerte.
Cuando se combinan estos elementos con la kinesfera, surgen diferentes acciones posibles, como deslizarse, flotar, sacudirse o dar toques leves.
Pero debes recordar que las ideas de la kinesfera de Laban no sólo se emplean en la danza, sino también en el deporte, en la arquitectura, y en toda forma de expresión corporal y su creación nos acompaña desde el momento de nacimiento hasta que morimos, haciendo que todo movimiento que realicemos sea una expresión de nuestra propia kinesfera.