El programa electoral del PSOE-A para las elecciones de 19 de junio al Parlamento de Andalucía apuesta por dar marcha atrás en los cambios en el Impuesto de Sucesiones y Donaciones. «En Sucesiones y Donaciones revertiremos la reforma fiscal del PP», anuncian los socialistas.
La hoja de ruta socialista para gobernar Andalucía admite sobre este tributo que contemplará «la exención fiscal de las donaciones realizadas en vida a familiares, de primer y segundo grado, cuando vayan dirigidas a la compra de una primera vivienda habitual del donatario o a participar en una empresa que aumente su capital social y mantener la inversión empresarial un mínimo de diez años y se cree empleo», con un límite de 500.000 euros por persona.
El PSOE modificó en 2018, a instancias de Ciudadanos, el Impuesto de Sucesiones y Donaciones, donde estableció una reducción en la base imponible de hasta un millón de euros y empezar a tributar a partir de esa cifra. El Gobierno de PP y Cs decidió en 2019 bonificar la cuota del impuesto hasta el 99% y justificó compatibilizarlo con «la reducción de 1.000.000 de euros sobre la base imponible, con la finalidad de no perjudicar a las adquisiciones por herencias de hasta dicho importe, ya que de otro modo tendrían que pasar de no tributar a hacerlo por el 1%».
El PSOE-A recrimina a «las derechas en Andalucía» sus «decisiones fiscales» al atribuirles que el sistema fiscal de la Comunidad «haya retrocedido hacia una menor progresividad fiscal y equidad social», así como colige la consecuencia de «una menor recaudación fiscal», que cifra un retroceso en el período 2020-2021 de «más de un 11% respecto a la de 2018, unos 250 millones de euros».
Además de la menor recaudación, el PSOE-A plantea como consecuencia añadida que «ha dado lugar a una menor y peor provisión de bienes públicos», junto con «limitar la misión redistribuidora de renta y riqueza del sistema fiscal».
El PSOE-A concluye que la carta de navegación fiscal de PP y Cs «se ha demostrado especialmente inadecuada para Andalucía» por el hecho de que «nuestra autonomía financiera es menor que la de la media de las comunidades y más dependiente de la financiación del resto de España para el mantenimiento de nuestros servicios públicos». «Pedir más financiación al resto del Estado y rebajar impuestos a los más pudientes no es ni justo ni responsable», reprocha el programa socialista.
Como contraposición a esas directrices, el PSOE-A blande un modelo fiscal «radicalmente distinto», del que pregona que sea progresivo según la renta y riqueza y le atribuye, además de «financiar los servicios públicos, que es su principal misión», su condición de «instrumento de política económica anticrisis, para estabilizar la economía, generar incentivos económicos».
UN MILLÓN DE EUROS PARA MÍNIMO EXENTO Y REDUCCIONES
El PSOE-A desgrana sus deducciones, bonificaciones y exenciones en diferentes impuestos, punto donde asegura que en el caso de «los mínimos exentos y reducciones generales de bases imponibles en diversos impuestos, como criterio general, tomar como referente un millón de euros para este tipo de mínimos y reducciones».
En el caso del IRPF aboga por acotar para las rentas de entre 30.000 y 60.000 euros, tanto para declaraciones individuales como conjuntas, los beneficios e incentivos fiscales, que se incrementarían para el tramo de 30.000 a 40.000, se mantendrían para el arco entre 30.000 y 60.000 y «eliminarlos para el resto de rentas».
AUMENTAR UN 50% EL INCENTIVO PARA NACIMIENTO, ADOPCIÓN Y ACOGIMIENTO
Con la premisa de que «los incentivos, desgravaciones y cheques fiscales irán dirigidos a los que más lo necesitan y tienen rentas bajas o medias», el programa socialista para las elecciones andaluzas de 19 de junio plantea aumentar un 50% la desgravación por nacimiento, adopción y acogimiento, de manera que pase de 200 a 300 euros, un crecimiento idéntico para los partos, adopciones o acogimientos múltiples.
El programa de los socialistas andaluces traslada desgravaciones para los contribuyentes que vivan en municipios con problemas de despoblación, para quienes plantea una deducción de entre 400 a 600 euros, así como para los contribuyentes con discapacidad (de entre 150 y 300 euros) o con cónyuges o parejas de hecho con discapacidad (de 150 a 200 euros).
Sobre las cuotas y tipos aplicables a los impuestos, el PSOE-A indica que en el IRPF, Patrimonio y Sucesiones y Donaciones, «aumentaremos las reducciones de tipos a las rentas medias y bajas, compensando los efectos de la inflación» y con la idea de volver a aplicar «el Decreto Legislativo 1/2018 del gobierno socialista». «Para evitar los errores de salto, todos los segmentos de bases liquidables tendrán alguna rebaja fiscal efectiva», indica el PSOE-A.
COMPRA DE VIVIENDAS: UN PUNTO MENOS O A LA MITAD
En el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales el PSOE-A quiere mantener el tipo general variable en el 10% para valores superiores al millón de euros en la compra de bienes inmuebles. El Gobierno andaluz, en la Ley 5/2021 de Tributos Cedidos de la Comunidad Autónoma de Andalucía, estableció un tipo del 7% como tipo de gravamen general para la transmisión de inmuebles.
Para compras de inmuebles para vivienda habitual, el PSOE-A propone con carácter general reducir el tipo al 5% en lugar del 6%, que llega a ser de un 3%, en lugar del 3,5%, para compradores menores de 35 años, personas con discapacidad, familias numerosas, víctimas de violencia de género, víctimas de terrorismo o municipios con problemas de despoblación.
La Ley 5/2021 de Tributos Cedidos, para transmisiones patrimoniales onerosas, establece un tipo reducido del 6% para compra de vivienda habitual con un valor no superior a 150.000 euros.
En Actos Jurídicos Documentados, el programa socialista propone en la compra de viviendas reducir el tipo al 0,2% en lugar del 0,3% para compradores menores de 35 años, víctimas de violencia de género, víctimas de terrorismo o municipios con problemas de despoblación.
En el caso de la tributación del juego, los socialistas andaluces se proponen «revertir la mayor parte de las rebajas fiscales que se plantean al juego, de difícil justificación en este momento, para volver a los tipos del Decreto Legislativo 1/2018».
«RESPETUOSO CON LA AUTONOMÍA FISCAL SIN JUSTIFICAR EL DUMPING»
El programa socialista se declara «respetuoso con la autonomía fiscal pero sin justificar el dumping entre comunidades autónomas» y el PSOE-A estima que la competencia autonómica a la baja en fiscalidad «sólo tiene como consecuencia el incremento de las desigualdades entre las comunidades autónomas».
Esgrime que «no tributan los territorios sino las personas», ámbito donde reclama que «las personas de igual capacidad económica contribuyan de la misma manera a los gastos del Estado» y que «las de mayor capacidad más que proporcionalmente que las personas de menor capacidad económica».
Reclama la armonización fiscal, junto al tratamiento de las rentas del capital, porque considera que es el camino para «asegurar una adecuada tributación de los contribuyentes con mayores rentas y patrimonios».
El PSOE admite que el contribuyente pueda «aprovecharse de las ventajas fiscales de alguna Comunidad Autónoma, como está ocurriendo en relación con el impuesto de sucesiones y donaciones o el impuesto sobre el patrimonio», pero con la premisa de conciliar las deducciones y bonificaciones.
«La consolidación de un sistema fiscal con las características que hemos detallado debería conducir a mejorar la suficiencia financiera del sector público andaluz, mejorar la justicia fiscal y hacerlo sin elevar la carga fiscal de las clases medias y los hogares más humildes», augura el programa socialista como balance de sus propuestas.