Endemia, pandemia, epidemia y otros términos similares son algunos con los que hemos tenido que familiarizarnos gracias a la llegada del Covid-19 y sus variantes, y eventualmente, las personas utilizan como expresiones sinónimas, cuando la realidad es que sus significados son muy diferentes. Y como resulta muy importante que hablemos con propiedad, hoy queremos explicarte que quiere decir el término endemia y sus diferencias con otros términos similares.
¿Qué significa el término endemia?
Es una palabra que tiene usos en la epidemiología, proviene del francés endémie, que a su vez es oriundo del griego ἔνδημος, pero por una transliteración se convirtió en la expresión éndēmos, que quiere decir “del terreno propio”. En este sentido, la expresión endemia se utiliza para referirse a un proceso patológico que se concentra de manera estacionaria en un espacio determinado o en una población específica por lapsos prolongados.
Es posible que se trate de enfermedades infecciosas, como el cólera, o no infecciosas como la gripe estacional, debido a que esta palabra puede emplearse para hacer referencia a múltiples condiciones o padecimientos fisiológicos, que se caracterizan por mantenerse concentrados en una población de huéspedes en una zona geográfica concreta por un prolongado lapso de tiempo, que puede durar años, a niveles estables, que pueden incluir variaciones estacionales.
¿Cómo se clasifican las endemias?
Se clasifican por los grados de intensidad con los que la enfermedad se transmite en los siguientes tipos:
- Hipoendémica: cuando el grado de transmisión de la dolencia es mínimo y los efectos de la misma no son relevantes.
- Mesoendémica: cuando la dolencia llega a establecerse en pequeñas comunidades. El grado de intensidad con el que se transmite puede ser variable, de acuerdo a cuáles sean las características locales.
- Hiperendémica: quiere decir que el grado de intensidad de la transmisión de la dolencia en una zona específica es persistente pero no se prolonga en el tiempo y la inmunidad de la población es insuficiente para poder prevenir los efectos que la dolencia produce.
- Holoendémica: se utiliza cuando la dolencia tiene un tipo de intensidad de transmisión alto, de modo que es perenne y se distribuye geográficamente de forma amplia, por causa de una respuesta inmune de los distintos grupos etarios, especialmente con relación a los adultos.
Ahora bien, dependiendo del grado de extensión que abarca el contagio de una enfermedad determinada o de la cantidad de individuos que resultan afectados por ella, se pueden utilizar expresiones como endemia, epidemia o pandemia, y en el caso de ésta última, la situación epidemiológica ha afectado a más de un continente.
¿Cuáles son los ejemplos de enfermedades endémicas?
Como ejemplos de dolencias endémicas tenemos en las regiones tropicales de África, sureste asiático y América la malaria, pero también el mal de Chagas, la tos ferina, la fiebre amarilla y el dengue.
¿Qué diferencia existe entre los términos endemia y pandemia?
El término endemia se relaciona con dos palabras que son conocidas, la primera de ellas es epidemia, que se relaciona con un brote de una enfermedad de tipo infeccioso, que se transmite de manera rápida en una comunidad o población. La segunda palabra es pandemia, y se refiere a una endemia que incide sobre un gran número de individuos y que no se circunscribe a una sola región o continente.
En el caso del Covid-19, ya podemos decir que es endémico, ya que va a seguir propagándose de un individuo a otro, afectando a personas en todo el mundo, de modo que es una endemia que se convirtió en epidemia y luego en pandemia, porque ha logrado hacer ambas cosas manteniendo niveles estables, y debido a las mutaciones que ha presentado, ya es posible decir que no va a desaparecer, sino que se va a volver endémica.
¿Qué papel juega la estabilidad para que una enfermedad se vuelva endémica?
Resulta que la estabilidad es fundamental, porque de ella depende la previsibilidad de la recurrencia de la enfermedad. La estabilidad es lo que puede ayudarnos a determinar cuántos individuos van a enfermarse, cuando es más que probable que lo hagan y en qué lugares se presentarán las mayores vulnerabilidades, para que los encargados de los sistemas de salud se preparen y puedan responder de manera adecuada al brote, permitiéndoles contener la propagación e impidiendo que se produzca un caso sanitario.
Un ejemplo de ello es la influencia, que ya es una enfermedad considerada endémica, porque ya se ha podido calcular que alrededor de un 8% de la población la va a contraer anualmente, concentrándose la mayoría de los casos en la estación invernal.
Además, los especialistas han podido establecer que las poblaciones más vulnerables a la misma son los niños y los adolescentes, pero quienes corren mayor riesgo de enfermarse de gravedad son los adultos mayores, las mujeres embarazadas, los niños que no han cumplido los cinco años de edad y los individuos que sufran de enfermedades crónicas o que tienen el sistema inmune comprometido.
Lo que debe hacerse para que se minimicen los efectos de la gripe son medidas sanitarias personales como cubrirse la boca al toser o al estornudar, lavarse las manos constantemente, y permanecer en nuestras casas cuando nos enfermamos. Es algo que se ha vuelto una rutina y que hacemos de manera instintiva, otra medida importante es la vacunación, y cada año entre un tercio y la mitad de la población se vacuna para prevenir la gripe estacional.
Lamentablemente, aún no se cuenta con las herramientas necesarias para poder determinar cuándo una dolencia pandémica podrá hacer la transición hasta convertirse en endémica, así lo ha dicho el Dr. Mike Ryan, quien es el Director Ejecutivo del Programa de Emergencias de la Organización Mundial de la Salud (OMS), al afirmar que “Es un juicio algo subjetivo porque no se trata solo de la cantidad de casos. Se trata de la gravedad y del impacto” que la misma produce en una población. Además la OMS cree que Ómicron no será la última variante.
No obstante, si es posible predecir que el Covid-19 va a seguir ocasionando graves casos y fallecimientos, antes de que se vuelva endémico, aunque en España se comenzará a vigilar la Covid-19 como una endemia tras la sexta ola. Tenemos que recalcar que el hecho que sea denominada una enfermedad endémica no significa que deje de ser peligrosa, porque va a ser produciendo efectos negativos, en particular en las poblaciones que sean calificadas como vulnerables.