El pan forma parte del grupo de alimentos que nunca falta en casa. Dada su versatilidad, puede tener cabida en cualquier comida del día y a casi todo el mundo le gusta. Sin embargo, es un producto que en sí puede dar bastantes problemas. Uno de ellos, y tal vez el más común, es que se pone duro al día siguiente. Hay una razón muy específica por la cual sucede este escollo, que de alguna forma niega la posibilidad de disfrutar la pieza. Pero te vamos a contar por qué pasa y las alternativas para hacer que vuelva a estar como recién hecho.
9Las bolsas también ayudan
Un pan perfectamente almacenando ayuda a que no se ponga duro tan rápido. Así tendrás mayor margen para incluirlo en tu mesa. Te sugerimos algunas bolsas que merecen la pena.
Por ejemplo, las de tela o papel son buenísimas para guardar el pan. Has de cerrarla, y con esto tu barrita quedará protegida por más tiempo. Evita las de plástico, estas lo que hacen es ponerte el pan gomoso y pierde la textura con facilidad.
