El pan forma parte del grupo de alimentos que nunca falta en casa. Dada su versatilidad, puede tener cabida en cualquier comida del día y a casi todo el mundo le gusta. Sin embargo, es un producto que en sí puede dar bastantes problemas. Uno de ellos, y tal vez el más común, es que se pone duro al día siguiente. Hay una razón muy específica por la cual sucede este escollo, que de alguna forma niega la posibilidad de disfrutar la pieza. Pero te vamos a contar por qué pasa y las alternativas para hacer que vuelva a estar como recién hecho.
2No te estreses si el alimento se pone duro
Si el pan que has comprado no te dura mucho tiempo suave no caigas en apuros. Todo indica que al día siguiente ya el alimento se pondrá un poquito duro. Tal parece que es más normal de lo que pensabas.
Además, existen técnicas específicas que te ayudarán a que toda vez el producto esté un poquito tieso pueda recobrar su textura, y que su sabor sea tan delicioso como cuando lo adquiriste en la panadería.
Seguramente con esto que te vamos a contar sabrás sacarle más provecho a las piezas que has metido en tu compras del mercado.