La bechamel es además de rica, muy versátil. Esta salsa de origen francés se ha convertido en una de las favoritas a la hora de cocinar y es perfecta para acompañar con todo tipo de carnes, preparar las más deliciosas croquetas y es uno de los ingredientes predilectos de la lasaña de carne, a la cual llena de una irresistible cremosidad.
Hacerla no es tan complicado; y de hecho, lo único a lo que debes estar atento es a la receta en la que la vas a utilizar, pues dependiendo de ello, será necesario hacerla más o menos espesa.
Ahora bien, si te gusta su sabor, pero te preocupa la grasa que aporta la mantequilla, tienes que conocer la manera en que la puedes lograr más ligera reemplazando este ingrediente. Hoy te presentamos una alternativa que te parecerá fantástica y con la cual podrás darle vida a cualquier platillo.
6Cómo añadir la leche
La leche se debe añadir poco a poco y recuerda, es fundamental que la misma se encuentre bien caliente.
Mientras añades la leche, remueve con el batidor de varillas hasta que se integre bien al roux. A medida que vayas incorporando la leche, remueve y luego añade un poco más. Continúa haciéndolo hasta terminar de verterla por completo.