Las costillas guisadas son una receta muy contundente, ya que saca lo mejor de estos trozos de carne. Esta parte del cerdo queda muy tierna y se sirve junto a una salsa que le va a las mil maravillas. Por lo que este plato es ideal para servir como segundo plato después de uno más ligero como una ensalada.
Además, no vas a necesitar muchos ingredientes para prepararlas, por lo que es un plato barato y sencillo. La elaboración tampoco es que sea muy complicada. A continuación, te mostramos cómo hacer costillas guisadas, la receta que desearás hasta los días de más calor.
9EL TOQUE FINAL DE LA RECETA
Cocina las costillas guisadas durante una hora y media a fuego lento. Ponle la tapa para que el calor se quede dentro del recipiente. Remuévelo de vez en cuando. Una vez que haya transcurrido ese tiempo, puedes ponerlo a máxima potencia durante unos minutos para deducir la salsa. También puedes retirarle el exceso de grasa con la ayuda de una cuchara y corregir el punto de sal.