Cualquier tipo de operación quirúrgica, por mínima que sea, supone una agresión para nuestro cuerpo. Por eso, el miedo es una respuesta totalmente normal. Si quieres descubrir cómo afrontar la tomofobia o el miedo al quirófano, te animamos a que sigas leyendo.
10La importancia de la desconexión mental
Es muy importante que no te preocupes por temas que puedes dejar solucionados con antelación. Existen asuntos tanto laborales como personales que se pueden dejar listos antes de la operación. Además, lo mejor es no trabajar el día antes de la intervención y por supuesto, procurar no agobiarse por cuestiones familiares. En el caso de tener hijos pequeños, lo mejor es pedir ayuda a algún familiar o amigos para que los cuiden tanto el mismo día de la cirugía como los días de después.
Si no lo haces de forma habitual, provecha unos días antes para practicar yoga, mindfulness o meditación. Te van a ayudar a relajar la mente y podrás ir con más tranquilidad a la operación. Hay que pensar que el objetivo de ese día es que acudas lo más fresco posible y sin miedo. Y eso es lo que tienes que tratar de conseguir.