Es complicado manipular el pollo y más cuando se nos dice por todos lados que no es necesario lavarlo antes de meterlo a la cocina. Por costumbre, casi todo el mundo higieniza las piezas para luego hacer su respectiva receta. Pero lo que han querido demostrar los expertos, es que la acción de lavar el ave no es lo más idóneo ya que puede conllevar a muchos problemas. Te los contamos en el siguiente artículo.
6Ten cuidado con las tablas y cuchillos
Otro factor a considerar es que la contaminación por el pollo puede producirse por los cuchillos que usas para cortar alguna pieza, o la misma tabla de cortar que por lo general se utiliza en el proceso.
Por lo tanto, tienes que andar con cuatro ojos porque si colocas tu pollo este tipo de utensilios tienen que ser higienizados a la perfección. Porque los demás alimentos que allí coloques después pueden contaminarse, y ya se convierte en un grave problema dentro de tu cocina.