Cómo conseguir que el queque quede esponjoso

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Un queque esponjoso es el sueño de todos los que aman un rico bizcocho, suave y delicioso. Con una miga esponjosa y con una corteza tostada y delicada, el queque, también conocido en muchos países como bizcocho o torta, es un básico de la repostería que te permite preparar innumerables postres.

Hacerlo puede parecer sencillo a simple vista; no obstante, tal como sucede con muchas otras preparaciones dulces, hacerlo cuidando cada detalle es lo que garantiza que quede perfectamente cocido y con una miga de ensueño. Si quieres preparar un queque esponjoso, quédate a conocer todos lo que tienes que saber.

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Cómo evitar que el queque termine crudo por dentro y quemado por fuera

Cómo conseguir que el queque quede esponjoso

A todos nos ha pasado alguna vez que el queque resulta muy tostado en la superficie, pero en su interior se conserva muy tierno e incluso crudo. Para que puedas evitar que esto suceda, espera que transcurran los primeros 35 minutos de cocción.

Al transcurrir este tiempo, introduce un palillo en el centro del queque y si este sale con restos de masa cruda, pero la superficie luce muy dorada, coloca un trozo de papel de aluminio encima para evitar que se queme.