Si bien los pimientos son originarios de América, los del piquillo pertenecen a una variedad autóctona de la Comunidad de Navarra; y de hecho, su producción está protegida con su propia Denominación de Origen, D.O Piquillo de Lodosa, con reconocimiento internacional.
La producción de estos pimientos suele recogerse y someterse a un proceso de asado y retiro de la piel para luego ser conservados en botes en los que son comercializados en todos los mercados.
Ahora bien, son tan ricos como delicados, así que si los quieres disfrutar con todo su sabor almibarado intacto, hay algunos errores que debes evitar cometer y que, definitivamente, destrozan el plato.
3Descongela de manera lenta en el frigorífico
Si decides descongelarlos lentamente y dentro de la nevera, planifica este proceso desde el día anterior, ya que solo así podrás esperar los tiempos prudenciales para que se descongelen completamente.
Pon los pimientos del piquillo sobre un plato para evitar que gotee el agua dentro de la nevera. Una vez que esté completamente descongelado, cocínalo de inmediato y consúmelo para evitar el crecimiento bacteriano.