A diferencia de los madrileños, los callos asturianos no llevan morcilla o chorizo; y por esta razón, son considerados como más suaves y finos. Para disfrutarlos al máximo suelen acompañarse con garbanzos cocidos con espinaca y bacalao y por supuesto, para cerrar la comida, la presencia de un postre tradicional no puede faltar.
Si eres de los que no se resiste al sabor de los buenos ricos platos tradicionales, tienes que preparar estos callos asturianos; te garantizo que no te vas a arrepentir.
10Termina la preparación de estos callos asturianos y disfruta de todo su sabor
Para terminar la preparación de los callos asturianos, pon el sofrito de lomo de cerdo en la olla, junto a los callos y sigue cocinando. Incorpora también el pan majado con los dientes de ajo fritos y deja cocinar todo por unas 3 horas.
Lleva a sofreír el jamón serrano en cubos y una vez que esté listo, ponlo dentro de la olla. Cuando los callos estén en su punto, será necesario reposarlos como mínimo una hora, aunque la verdad, están más sabrosos al día siguiente.
Si bien, su preparación es algo laboriosa, su sabor bien vale la pena; así que anímate a prepararlos y disfruta de los callos asturianos al máximo de su sabor.