La tarta de queso es toda una delicia y no hay quien se resista a comerla en cada una de sus presentaciones. Bien sea que la hagas fría, o con una base horneada, este postre siempre te hace triunfar. Ahora bien, si eres de los que ama la delicadeza de esta tarta; y a la vez, te gustan los aromas y toques gustativos deliciosos, tienes que prepararla con este cítrico, el cual te hará disfrutar de una de las mejores experiencias.
7Comienza preparando las naranjas amargas para el relleno
Mientras esperas que la base de la tarta de queso se enfríe, ve preparando el relleno. Para comenzar, trabaja con las naranjas amargas.
Lava muy bien las naranjas amargas y sécalas por completo, retirando toda la humedad de la piel. Una vez que las tengas secas, pásalas por un rallador cuidando de no rallar la parte blanca de la piel, ya que esta amargaría el relleno.
Al terminar de rallar la piel, procede a cortar las naranjas amargas a la mitad y exprimir todo el zumo. Reserva ambas cosas.