Si eres de los que no te pierdes la oportunidad de preparar unas ricas nubes de azúcar, hacer este postre de isla flotante será para ti el mayor de los placeres. Un pastel suave, esponjoso y espumoso que se derretirá en tu boca sin tener que masticar. Es un dulce pecado al que no te vas a poder resistir.
La isla flotante es tan delicada que es apta para todos en casa. Los niños la amarán, los adultos mayores lo podrán degustar sin problemas y en general, todos quedarán definitivamente enamorados. Anímate a prepararla y verás que fácil es.
9Proceso de horneado de la isla flotante
Apenas termines de poner el merengue dentro del molde, busca una bandeja y coloca un paño en el fondo de la misma. Coloca el molde con la isla flotante sobre este y llena la bandeja con agua caliente para cocinar a baño maría.
Colócate unos guantes para que evites quemarte al tomar la bandeja con el paño, el agua caliente y el molde e introdúcela en el horno precalentado por un tiempo de 50 a 60 minutos. Si deseas que la base de la isla flotante quede suave, cubre el molde con papel de aluminio. En caso de preferirla crocante, déjalo descubierto.