La focaccia es una receta italiana, muy tradicional y deliciosa; y no por ser italiana, se le escapa a Joseba Arguiñano, quien ha demostrado que tiene el mismo carisma que su padre, Karlos, para presentar los más deliciosos platos y hacerlos lucir sencillos.
La más famosa focaccia es la genoves, a la cual solo se le coloca aceite de oliva y sal gruesa en la superficie, lo que la hace muy parecida a las tradicionales saladillas. La otra variante tradicional de la focaccia es con una capa de cebolla en la superficie y de allí en adelante, muchas versiones más.
La masa para preparar la focaccia es muy sencilla de hacer y sumamente rápida; sin embargo, requiere de mucho tiempo para prepararla, debido a que la misma, lleva tres fermentaciones.
10Hornear la focaccia
Mientras se reposa la masa, enciende el horno a 230 °C, para que esté caliente al momento de hornear la focaccia; una vez que haya transcurrido el tiempo de reposo de la focaccia, con los dedos realiza los hoyos en varias partes de la masa.
Este es el momento de aplicar el truco de Arguiñano y bañar con la mezcla reservada. Agrégale la flor de sal en la superficie, baja la temperatura del horno a 190 °C, e introduce la bandeja en el horno por 12 a 15 minutos. Una vez que esté dorada, retira del horno y deja reposar un poco, corta y sírvela.