Caracoles a la madrileña: el plato que casi nadie hace y que sale divino

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Los caracoles a la madrileña fueron por muchos años toda una tradición que preparaban las abuelas; hoy en día, a pesar de que es mucho más fácil y saludable la adquisición de los caracoles de cultivo que en esa época, en la que se consumía el caracol salvaje, este plato es más difícil de encontrar.

Los caracoles a la madrileña  fueron una de las tapas más solicitadas en los bares españoles; no obstante, estos han ido desapareciendo progresivamente de las cartas de algunos restaurantes. Ahora bien, hay muchas familias que conservan la receta y los preparan en ciertos días festivos. Anímate a prepararlos y vive la tradición.  

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¿Cómo lavar los caracoles?

Caracoles a la madrileña: el plato que casi nadie hace y que sale divino

Para lavar los caracoles, debes colocarlos en una olla con agua fría, un chorrito de vinagre y agregar abundante sal, déjalos por una media hora y asegúrate de colocarle la tapa a la olla; de lo contrario, se pueden salir de la misma. Transcurrido el tiempo para que suelte la baba, los pones en el grifo y los lavas frotándolos con la mano.

Este proceso se repite 2 veces más para estar seguros de que hayas eliminado la baba. Debes repetir el remojo de los caracoles en sal y vinagre, pues si no la eliminas, esta baba es la que le puede dar un sabor amargo a tu plato. Es conveniente eliminarla en su totalidad.