La nata montada es una de las preparaciones más básicas en la repostería y es por eso que forma parte de la elaboración de los más diversos postres, rellenos y coberturas. Hacer que esta quede bien montada y firme, tiene algunos truquitos que debes conocer y no, no se trata de batirla mucho; todo lo contrario, si la bates en exceso, terminarás haciendo mantequilla.
A diferencia de otras cremas dulces, cuyo éxito depende del batido, en el caso de la nata, es cuestión de temperatura y de otros detalles que son muy fáciles de seguir. Quédate a conocerlos y consigue montarla de manera perfecta en cuestión de minutos.
3La temperatura de la nata, un factor que no se debe descuidar
La regla número uno, al llegar a casa con la nata, es llevar está a la nevera y dejarla allí hasta el momento en que vayas a utilizarla.
Para que pueda quedar muy cremosa y consistente, es necesario que se encuentre completamente fría. Si intentas montarla a temperatura ambiente o caliente, está, nunca tomará cuerpo.