La primavera trae consigo los molestos síntomas de la alergia al polen. Es una de las afecciones más sufridas por la población. De hecho, en España alrededor del 20% de la población la padece. Algunos de los síntomas más comunes son la congestión nasal, el lagrimeo y enrojecimiento de los ojos, la conjuntivitis o el aumento de la mucosidad nasal. No existe remedio que lidiar con ello, pero si una serie de consejos que te ayudarán a mejorar y así, poder disfrutar de esta estación tan bonita. A continuación te recomendamos una serie de hábitos que, si los adoptas, mejorarán sensiblemente tu exposición al polen.
4Alergia: cambiar con más frecuencia tu almohada y sábanas
Otro hábito para aliviar los síntomas de alergia es algo tan sencillo como cambiar con más frecuencia de lo normal tu almohada y sábanas. Esto evita la acumulación de partículas en ellas. Además, un lavado con agua bien caliente eliminará por completo los restos que puedan quedar en ellas.
Muchos expertos recomiendan cambiar la almohada cada dos años y no solo por el nivel de apoyo del cuello y la cabeza, sino por las posibles infecciones por los ácaros y la suciedad. Y es que hay que tener en cuenta que los aceites del pelo y los corporales impregnan los tejidos cada noche, haciendo que la almohada pierda hasta las propiedades que aseguraban protegernos de ácaros y alergias.