Una de las profesiones más infravaloradas, probablemente sea la del Community Manager. Porque la gente se piensa que es solo estar en las redes sociales, y punto, pero hay ciertos factores de presión, que hacen que sea un trabajo duro. Lo que pasa es que perlas como las que vamos a ver aquí, la gente se piensa que es algo bastante sencillo.
[nextpage title=»El asunto de la ruka»]
Uno de los problemas más difíciles que tiene un Community Manager es que se debe tomar las cosas con humor. Y enfrentarse a clientes enfadados, situaciones difíciles, y problemas con otras personas, porque es el representante del negocio en Internet. Y en la era en la que estamos, lo mejor es que sea una persona consciente de la marca, para luego no cagarla cuando haya trolls o graciosillos que quieren hacerse un hueco en la red. Por eso, aquí van algunos ejemplos.
El problema llega cuando no tienen mucha idea, o cuando se enfadan con facilidad, y se olvidan de que están representando a una marca en concreto. Por eso, es un trabajo de doble filo, y no se trata únicamente de hacer chistes en el momento oportuno. También hay que tener un poco de tacto, y sobre todo, encajar bien las bromas, si al final llegan a trolearte.
11Chiste repetido
Sí, los CM de las distintas compañía deben leerse unos a otros, porque es imposible hacer chistes a todos, a no ser que los hagas al mismo tiempo. De todas formas, el chiste es bueno la primera vez, y la segunda es repetitivo, así que no nos queda más que reírnos en su cara, por haber intentado ir de original, cuando realmente no lo era.