- Margaritaville Island Reserve Cap Cana es un exclusivo hotel de lujo que revoluciona el concepto del todo incluido.
- Margaritaville cuenta con 228 suites y 40 espectaculares Island Reserve villas.
“Si la vida te da limas, haz margaritas”. Esta, quizá, sea una de las citas más famosas del cantante Jimmy Buffett. Y es, sin duda, una que explica, a la perfección el espíritu que impregna el hotel Margaritaville Island Reserve Cap Cana, en playa Juanillo, una de las zonas más exclusivas de República Dominicana. De esta forma, Karisma hoteles, a través de Margaritaville, revoluciona el concepto tradicional del lujo y lo libera de cualquier corsé y etiqueta. Una vez que cruzas la gigantesca chancla que corona la entrada, todo se torna libre y divertido. “Licencia para relajarse”, resumen desde el resort.
Hasta más allá de mediados del siglo XX, la zona de Punta Cana, ubicada en el Este de República Dominicana, estaba formado por una gran masa vegetal en forma de selva. Aunque si bien, las playas eran paradisíacas, apenas nadie disfrutaba de ellas ya que el acceso era muy difícil y la zona era prácticamente desconocida para los habitantes del país. Más incluso para quienes vivían fuera de República Dominicana.
Sin embargo, a finales del año 1969 la historia de Punta Cana comienza a dar un giro importante. Es en este momento cuando un grupo de inversores norteamericanos ve el potencial turístico que tiene esta zona y adquiere una gran extensión de terreno con el fin de comenzar a levantar una infraestructura hotelera. Así se construye el primer hotel de Punta Cana que, en solo dos años, en 1971 ya es inaugurado. En este momento Punta Cana comenzaba a despertar. Poco a poco, las grandes cadenas hoteleras se instalaron y consolidaron el concepto “All-Inclusive”. Hasta que llegó Margaritaville e hizo su magia.
228 suites y 40 villas
Margaritaville cuenta con 228 suites y 40 espectaculares Island Reserve villas. Las suites no dejan indiferente a nadie, con una decoración de inspiración náutica que incorpora la vibra relajada del Mar Caribe. Decorada en tonos azules y tierra, entrar en una de estas habitaciones te transporta inmediatamente a un océano de calma, en el que relajarse y disfrutar de las amenities es prácticamente una obligación. Es, precisamente, el minibar otra de las revoluciones que capitanea este hotel. Mediante un sistema de puntos, que se cargan en la tarjeta de la habitación, los clientes pueden ‘comprar’ en el colmado Joe Merchant’s Coffee & Provisions una amplia variedad de artículos, de chocolatinas, bebidas alcohólicas, cafés, refrescos…
Todas las habitaciones, además, cuentan con un balcón privado con mobiliario y vista hacia la piscina, los jardines o al Mar Caribe, perfecto para relajarse con un café por la mañana o para disfrutar una bebida, así como aire acondicionado, ventiladores de techo, Smart TV, una cama tamaño King o dos camas Queen, caja de seguridad, kit de amenidades, teléfono, batas de baño de lujo, secadora para el cabello y espejo de maquillaje.
Una gastronomía de altura
La gastronomía es otro de los puntos fuertes en los que se sustenta este nuevo modelo de ocio. Lejos quedan aquellos buffets y restaurantes nivel medio en los que la cantidad prima más que la calidad. Así, podemos encontrar Landshark, un amplio restaurante americano con diseño industrial que fabrica su propia cerveza artesanal, ideal para ver los deportes en sus pantallas gigantes. Por otro lado, Frank & Lola’s es una excelente trattoria. Un sitio relajado, que sirve comidas italianas artesanales, auténticas, y exquisitamente preparadas. Además, está JWB Steakhouse un local diseñado para ser mucho más que una experiencia culinaria. JWB es un destino en sí mismo. Los huéspedes pueden elegir sus cortes preferidos con un asado a la parrilla perfecto, mientras que su bar es un espacio perfecto para disfrutar cócteles creativos antes de la cena.
Los amantes de la comida asiática podrán disfrutar del arte y la gastronomía de estos países en Mon So Wi, un local para vivir al límite, con especialidades culinarias urbanas e icónicas, recién salidas del wok. Por último, podemos disfrutar de Rum Runner’s, un bar que rinde tributo a los contrabandistas del ron. Y es que pese a que los días de Rum Running de McCoy se han acabado, el ron caribeño no ha dejado de florecer en el último siglo. Rum Runner´s es un guiño al espíritu favorito del Caribe. República Dominicana y las Indias Occidentales tienen una larga historia de producir algunos de los mejores rones del mundo y este restaurante es la oportunidad degustar su gastronomía.
Son las 5 de la tarde en alguna parte
La oferta líquida tampoco se queda atrás. En inglés, “To Pack a Punch” significa “tener un efecto positivo en las emociones o actitudes de alguien”. Situado en el corazón del Entertainment Village, el bar “Punch” es un escape caribeño perfecto. Con vistas a las piscinas y el océano, su energía es seductora, intensa o relajante según el estado de ánimo de cada uno. Un sitio perfecto para reunirse a cualquier hora del día, con actuaciones en vivo por las noches.
Y, ¿qué mejor opción para disfrutar de unas bebidas que con una canción de Jimmy Buffett? Como dice la canción que da nombre a este bar ‘It’s 5 o’clock somewhere’, “el sol calienta y el viejo reloj avanza lento”. Ubicado a un lado de la piscina con una maravillosa vista a la playa Juanillo, este local se convierte en el sitio perfecto a cualquier hora del día para un coctel a un lado de la piscina, una cerveza fría o las mundialmente famosas margaritas de Margaritaville, con una mención especial a la de maracuyá.
Un spa de más de mil metros cuadrados
Aquellos que deseen relajarse y llevar el hedonismo a otro nivel, se merecen la escapada defnitiva al St. Somewhere Spa by Karisma. Con 1384 metros cuadrados, St. Somewhere Spa cuenta con 14 salas de tratamiento queinducen a una plenitud mental, incluidas 3 salas para parejas con bañeras y una exclusiva suite nupcial, así como un salón de belleza de servicio completo y un moderno gimnasio Fins Up. El área de hidroterapia incluye un cuarto de vapor con esencia de eucalipto, sauna, ducha con esencias y cromoterapia, ducha tipo cubo, bañera de hidromasaje, laguna polar, piscina sensorial y tumbonas termales. De esta forma y dedicado al completo bienestar, St. Somewhere Spa, by Karisma ha creado servicios de inspiración tropical diseñados para despertar los sentidos, fortalecer la circulación, calmar los nervios, mejorar la digestión y promover un metabolismo equilibrado.
Margaritaville es, en definitiva, un remanso de elegancia y paz, un mar de relax y lujo en el tras pasar unos días, uno no puede dejar de repetirse la famosa frase de Jimmy Buffett: “A veces ha sido mágica, a veces trágica, pero, al final, he tenido una buena vida”. Y tras vivir esta experiencia la magia, definitivamente, crece.